El exito de la disectomía percutánea radica en la buena indicación quirúrgica, es decir, en la escogencia del paciente. A nivel lumbar, existe un 91% de excelentes resultados, un 7% de buenos resultados y un 2% de resultados considerados como regulares o malos.

Este último comprende los pacientes que no presentaron ningún tipo de mejoría luego de la disectomía; cabe destacar de que no existió agravación de los síntomas preoperatorio en ningún caso. A nivel cervical el resultado de éxito es muchísimo mayor, con un 98% de excelentes resultados y solamente un 2% de resultados considerados como regulares o malos; a nivel cervical asistimos a una mejoría inmediata de la sintomatología al salir el paciente del quirófano.

Esto varía de un paciente a otro. Hay que tomar en cuenta la edad del paciente, el peso, el tipo de trabajo que realiza; de ahí deducimos que un individuo que realiza un trabajo de oficina puede reintegrarse más rápidamente que un obrero que realiza trabajos de esfuerzo. En promedio el período varía de una semana a 30 días. Ir al inicio de la página.

La disectomía percutánea, por ser un método ambulatorio, es decir, sin hospitalización, sin anestesia general y sin cirugía abierta hace suponer que su costo sea infinitamente inferior a la cirugía convencional (laminectomía o microdisectomía) la cual implica anestesia general, hospitalización de varios días y un período de recuperación de semanas o meses. Se estima que la discectomía percutánea es entre un 60%-70% más económica que la cirugía convencional. Ir al inicio de la página.

Existen pacientes que deben realizar rehabilitación pero son muy pocos, estos serían los pacientes que llegan en muy malas condiciones a la intervención con un fenómeno compresivo importante; en estos casos la rehabilitación es el tratamiento complementario de la disectomía percutánea.