La Resonancia Magnética (MRI) se ha vuelto en muchos casos el estudio preferido en casos de hernia discal. Su resolución superior de los tejidos suaves da buena definición del material del disco, la compresión del cordón y la compresión de las raices nerviosas. Cuando se requiere detallar el hueso resulta conveniente realizar una tomografía axial computada con contraste intrarraquideo.